Hemos convertido a Coamo en el lugar favorito para reunión familiar.
Tercera vez que vamos. Es que se pasa tan bien!
Aprovechamos la estadía en Puerto Rico de los primos Maru y Osvald para invitarlos. A la vez celebramos el cumple de Natalia, Kiara y Osvald, en el mes de noviembre.
Pasamos el día en las hamacas de gazebo, y comiendo, claro está.
El paisaje siempre espectacular. Al caer la noche hacemos la fogata. Teníamos luna nueva y pudimos ver algunas constelaciones en el cielo estrellado.
Entramos al “casco “ de Ciales para ver el Museo del Café.
Tiene una terraza en el centro para sentarse a disfrutar de meriendas y café hechas allí . El café, por supuesto, de Ciales.
Hay un área con animales de granja: gallinas, pollitos, gallos, cabras, otras aves y la estrella del lugar, un burrito que se deja acariciar y retratar y cada rato rebuzna llamando a la gente, Una chulería.
También hay un área de exhibición con objetos antiguos relacionados con la producción del café en Puerto Rico.
Una tinaja de estas había en la casa de mi abuela paterna, Manola.
Una mañana lluviosa y con neblina en el camino, subimos las sinuosas cuestas de Ciales, en la Cordillera Central, buscando el chinchorro Casa Vieja, que ya es famosa en la isla.
Es uno de esos restaurantes muy típicos, en una empinada curva que todos los fines de semana se llena de boricuas buscando ese sabor y ambiente de la montaña.
Pues hasta allí llegamos luego de un viaje de cerca de una hora desde San Juan.
Nos gustó el ambiente y nos ubicamos en la terraza.
Otro chubasco.
El menú son frituras. No somos fritoleras, pero las comimos con gusto.
El ambiente, los utensilios, los muebles y cosas antiguas que se usaban en el campo de nuestros abuelos dan este toque típico que hace que sea un lugar muy acogedor y pintoresco.
Para completar la delicia, la lluvia, sus sonidos y la neblina, que no se ve en la ciudad, lo hicieron inolvidable.
Nos gustó tanto la estadía en Coamo que decidimos regresar. Esta vez a celebrar el cumple de Chagui y Lizette.
Pasamos dos días deliciosos en completa tranquilidad disfrutando de la naturaleza y esos bellos paisajes.
Kiara
Keira
La estancia tiene un gazebo con hamacas, un baño y las facilidades para hacer barbacoa.
Explorando…
Chagui y Juany Sunset nos acompañó, feliz con la compañía y todo lo que comió.
Tuvimos un atardecer perfecto.
Entrada la noche hubo luna llena, para completar!!🥰
Manuel, el dueño de la estancia nos había dejado preparados los leños para hacer una fogata.
Otra experiencia inolvidable en Coamo. Regresaremos.
Para celebrar el cumple de Natalia escogimos la Estancia Don Polito, un Rbnb en Coamo. Esta localizado en la cima de un monte desde donde se ve al este la bajura, y en el lado oeste podemos apreciar el atardecer. Perfecto!
Esta casa, que tuvimos solo para nosotros, tiene todas las comodidades, solo tuvimos que llevar la compra de comida.
No tuvimos que salir para nada porque el lugar es tan agradable que queríamos quedarnos todo el tiempo que pudiésemos. Vimos un atardecer espectacular.
Improvisamos canciones para la montaña.
Le lo lai….
Quisimos hasta bailar!
Todo se veía dorado!
Había un gatito en el patio, lo alimentamos y le llamamos Sunset. Luego nos enteramos que tiene muchos nombres, por los invitados que han venido a esta estancia.
Y llegó la noche.
Al otro día nos levantamos temprano y vimos el amanecer desde la gran terraza que está en el este.
24 noviembre 2018. Camino a Coamo nos detuvimos a almorzar en Delicias a Leña en Cayey. Un restaurante enclavado en la montaña con ambiente típico y acogedor.
Hacen pizzas artesanales horneadas en leña. El paisaje desde la terraza es bello.
En Puerto Rico celebramos la Navidad desde noviembre.
Vamos rumbo a Moca, pero antes nos detuvimos en una panadería recomendada. Allí compramos croasants y pastelillos, riquísimos.
Seguimos hacia El Barrio Aceituna para visitar el Palacete Moreau, también conocida como la Mansión Labadie.
Construida en el 1893, y varias veces restaurada, hoy es un museo que muestra el estilo de vida de los hacendados que tenían grandes extensiones de tierras donde cultivaban café ,caña y criaban ganado.
Esta mansión inspiró a Enrique Laguerre a escribir su novela “ La Llamarada.” De hecho, en los predios de sus jardines hay un monumento dedicado a él.
De nuevo en este pueblo que nos gusta tanto. Esta vez nos quedamos en el Rbnb Casa Nancy. Olga, que se encuentra de visita en la isla, nos acompañó en este paseo.
También llevamos a Halo, pues el Rbnb es pet friendly.
La casa es de dos pisos desde el cual se aprecia el mar, cómoda, con todo lo necesario. Nos gustó.
El domingo paseamos por el faro.
Luego visitamos el Vegan Market de los domingos, en la plaza del pueblo.
Hay artesanos, kioskos de comidas naturales y veganas, artesanías, música y el ambiente es agradable.
Aprovechamos para tomarnos agua de coco friito y totalmente natural. Nos recordó nuestra adolescencia en Cabo Rojo…
Hicimos una parada en Aguadilla, en el área de Real Marina, justo en el centro del municipio. El mar y el cielo mostraban unos azules bellísimos.
Visitamos luego el Parterre, conocido también como el Ojo de Agua.
Desde la llegada de los españoles a Puerto Rico, hace 527 años, este manantial natural ha estado dando agua. El puerto de Aguadilla era un alto para los barcos españoles que se abastecían de agua. Le llamaban Ojo de Agua. A la llegada de Ponce de Leon, creyeron que el lugar era la legendaria Fuente de la Juventud.
Un paseo por este parque es un calmante, tiene la frescura y sombra de árboles mientras escuchas el rumor de las fuentes.
El lugar ha sido remodelado varías veces. Encontré fotos antiguas que muestran cómo era hacia el 1900. El flujo del agua nunca se ha agotado.
Camino a pedirle a Jacinto que traiga la vaca. La carretera que nos lleva a la Playa Jobos en Isabela, bella, rodeada de palmares. Tiene senderos preparados para caminar o correr bicicletas. Hay numerosos restaurantes y chinchorros y hay mucha gente paseando.
Detras de uno de estos chinchorros encontramos el sendero que nos lleva al Pozo de Jacinto.
Llegamos a la playa, al fondo está el pozo.
Este nombre dado por la imaginería popular de este pueblo corresponde a una leyenda que más adelante verás explicada en un vídeo.
De modo que hicimos lo que hacen todos los boricuas, llamamos a Jacinto.
Luego de llamar varias veces a viva voz, el mar se enfureció. Bueno, decidimos caminar por el paseo tablado hacia la Playa Montones, el paisaje bellísimo.
Esta vez en ruta hacia la costa de Isabela, al norte de la isla. Una de las rutas más famosas por sus paisajes y playas.
Primera parada frente a la cara del taíno. Tina, Ariana, Mary y Lizette.
Seguimos hacia Villa Montaña Resort, en El Barrio Bajuras que casi colinda con la costa de Aguadilla.
Allí nos encontramos con Chagui y Juany. Aprovechamos para celebrar el cumple de Lizette.
Este resort tiene el restaurante El Eclipse, vamos a conocerlo.
Llegamos !
Es famoso por sus pizzas artesanales cocinadas en horno de leña. Suena delicioso!
Este restaurante tiene una decoración atractiva y está justo en la orilla del mar.
Chagui nos hizo unos únicos regalos, artesanía que él mismo hace, repujando en metal.
En Arecibo, luego de curvas y cuestas, llegamos al Radio Telescopio de Arecibo, que fue considerado el más grande del mundo en su clase. En el 2016 China construyó uno de mayor tamaño.
Los científicos astrónomos de la Universidad de Cornell decidieron construirlo en Puerto Rico por haber hallado aquí el lugar y la latitud idóneas.
Tiene un centro de visitantes muy interesante donde se exponen información y objetos relacionados con la astronomía y las investigaciones que allí se hacen.
Este es el fragmento de un meteorito.
Probamos el mantecado que comen los astronautas…no sabe igual, pobres…
Fue una experiencia muy interesante y lo pasamos bien!
Para el mes de febrero hicimos un paseo por la costa de Arecibo para ver la famosa estatua “Nacimiento de un Nuevo Mundo”, Aprovechamos el paseo para celebrar el cumple de Marina.
Estaba cerrada al público, solo pudimos verla desde la carretera. Decidimos almorzar en un chinchorro aledaño que lleva el mismo nombre del monumento.
Comida típica de los chinchorros boricuas:
Para bajar la pipa decidimos caminar un rato por la playa, pues la zona es costera.
Ariana nos cuenta algo en inglés, pero no se engañe, la niña es Pura Boricua.
En ruta por la carretera 518 en Adjuntas llegamos hasta el restaurante y barra La Bellota. Cruzando la calle está la entrada del sendero que nos lleva a este puente.
La caminata toma cerca de 20 minutos. El camino, algo difícil, requiere calzado deportivo. Hay que llevar un paraguas, pues es común los chubascos.
Cruzamos el puente emocionados. El paisaje es bello y relajante.
Así completamos el paseo de este día, nos llevamos recuerdos muy gratos.
Hicimos este bello paseo por el Canal de Blasina de Carolina. Este canal forma parte del Estuario de la Bahía de San Juan. Abordamos una lancha en el embarcadero que se encuentra en los previos del Museo del Niño.
La última parada en el recorrido es la visita al faro,por cierto el segundo más antiguo en Puerto Rico, después del Morro.
El faro se encuentra en uno de los salientes quedan al mar, por eso les llaman las Cabezas de San Juan, y son cuatro.
Desde allí se ve la bioluminiscente, Laguna Grande.
El faro ha sido convertido en un museo. Esta es la escultura de Moisés, nuestro legendario manatí, que nos cambió la percepción de lo que era esta especie y se convirtió en símbolo de nuestra lucha por la conservación de la vida en el mar.
La estructura ósea de un manatí.
Este pequeño museo contiene muchísima y valiosa información para los visitantes.
Hay peceras con especies marinas, muestras de fósiles, de organismos bioluminiscentes y el guía contesta todas las preguntas.
Ahora subiremos a la terraza para una vista panorámica de la costa de Fajardo.
Aquí aprovechamos para las fotos familiares.
Bueno… hasta aquí el recorrido. Regresamos al pabellón.
Listos para iniciar el recorrido de la excursión de los ecosistemas y el faro.
Comienza el paseo por el bosque seco que bordea la playa.
Pasamos por la entrada de la laguna bioluminiscente.
La primera parada nos lleva al recorrido de los manglares, un importante ecosistema poco comprendido, sin embargo vital para la preservación del ambiente.
El guía nos fue mostrando los cuatro tipos de manglar, cómo identificarlos y sus adaptaciones en el ecosistema.
Los mangles botón y negro son los más cercanos a las áreas secas.
El magle rojo está muy bien adaptado al agua salada: sus raíces se anclan en el agua y al caer y descomponerse sus hojas forman un sedimento color rojo en el fondo del agua, de ahí su nombre.
Flor del mangle negro.
Un gungulen, muy desarrolladito, el tipo.
Ahora nos dirigimos a la playa Los Lirios. Que resulta sorprendente.
La colina que se ve en el lado izquierdo está formada por roca ignea, volcánica .
Las rocas la lava petrificada que se asentaron aqui hace probablemente millones de años, le dan a esta playa este distintivo, es arena negra.
Nos muestran rocas fosilizadas de lo que eran corales.
Como hay tantas rocas, la gente ha dejado ësculturas espontáneas,
Llegamos al pabellón Para la Naturaleza, organización que tiene a cargo la administración, conservación y las actividades turísticas de este lugar natural.
En su entrada hay un gran árbol de Ceiba, debe tener bastantes años.
Nos registramos en el lobby.
Tienen mucha informacion acerca de como desarrollar huertos caseros y en espacios limitados.
El pabellon es fresco y tiene dos largos corredores.
Esta en la playa Seven Seas.
Mientras esperamos la salida de la excursion, aprovechamos para descansar y mecernos en sillones de madera. Ahhh!
Ariana, Marina, Eddie y Angel.
Lizette y Marina
Natalia y Mari
Esta tan rico que me puedo quedar dormida… Raque que raque…